Cómo transformar tu habilidad en un trabajo freelance, para que sea rentable.
Dependiendo de tu perspectiva lo puede ser como un imposible, como el trabajo de tus sueños o realmente ir a por todas y conseguirlo.
En los tiempos actuales el trabajo remoto ha llegado para quedarse. Trabajar como autónomo en tu especialidad es un desafío, un sueño y para muchos una realidad.
Debes saber que para tener éxito ofreciendo tus servicios como freelancer a través de internet, no basta con poner anuncios en algunos portales.
En primer lugar hay tener claro que sabes hacer, qué se te da bien, de manera que puedas hacerlo para otros. ¿Cual es tu talento? Diseñador, programador, marketing, informática, traductor, productor de contenido, fotografía… Sea cual sea tu talento o tu profesión, si quieres trabajar de forma independiente puedes empezar en este preciso momento.
¡Presta intención a estos consejos!
1. ¿Qué sabes hacer? Elige tu talento. Conoce y define tu capacidad profesional. Además te saldrán oportunidades más adelante de manera que aumentarás el abanico de tus servicios.
2. ¿Qué te gusta hacer? Si además te encanta, será la combinación perfecta sin duda. Esta es una oportunidad para darle salida a tu hobby por ejemplo.
3. Mercado ¿Cuánto estarían dispuestos a pagarte por ello? Pon un precio por lo que harás en función de la demanda/oferta. Segmenta con precisión tu mercado. Concentrando esa parte del mercado, conseguirás que el cliente acuda a ti para solucionarle ese problema en concreto. Saber dónde buscar …
4. Tu perfil. Defínelo cuidadosamente y recuerda: los detalles importan pero contar lo justo a veces es suficiente. Añade algún video que muestre que y cómo lo haces. Crea un perfil lo más ajustado posible a la perspectiva del cliente. Convierte tu talento en la solución más ventajosa para el. Debes saber cómo promocionarte y saber diferenciarte de tu competencia.
5. Herramientas. Consigue las mejores herramientas para realizar tu trabajo y aprende a manejarlas antes. Evoluciona y crea al mismo tiempo que aprendes. No caigas en el error de probar primero con el cliente.
6. Comunicación y Empatía. Tener empatía con tu cliente te ayudará a construir una relación profesional excelente. Mantén una comunicación abierta con tus clientes. La transparencia y la sinceridad no son puntos débiles, sino que te ayudarán a conquistar ese trabajo o proyecto y en definitiva la confianza mutua.
7. Puntualidad. Sé puntual con la entrega y responsable con la tarea que te han encomendado. Será un punto a favor para próximos encargos. Márcate un horario y cúmplelo.
8. Originalidad. Sea cual sea tu talento o capacidad, sé original. No copies. Rompe con ese esquema aburrido, pero sin perder de vista las indicaciones del cliente.
9. Mejora. Fórmate, recíclate, aprende y perfecciona tu labor. Convierte el tiempo en tu aliado para ganar conocimientos y avanzar.
10. ¡El último consejo y el más importante! Cumple los anteriores, intenta adaptarlos a ti, a tu perfil y empieza a destacar. ¿Las buenas noticias?
Que solo tu actitud determinará si actúas o pospones, si avanzas o retrocedes, en definitiva, si vas a por el éxito o a por el fracaso.
Y si estas dispuesto a arremangarte, la recompensa final puede ser muy grande.
