El español llegó a Estados Unidos en 1513 cuando el vallisoletano Juan Ponce de León desembarcó en las costas de Florida. Desde esa fecha, muchos hechos indican la importancia del español en el territorio norteamericano, como que el 15% de sus estados y ciudades tienen nombres de origen hispano o la circunstancia que la primera constitución de California se publicó en inglés pero también en español. Tan es así, que más de 500 años después, EEUU es el país con mayor número de hispanohablantes donde no es lengua oficial o de facto.

Números en mano, en Estados Unidos hay un total de 57,6 millones de hispanohablantes, solo por detrás de México (121 millones) y por delante de Colombia (48 millones) y España (46 millones), y es ya la quinta nación del mundo con mayor número de hablantes nativos, con 41,8 millones de estadounidenses que hablan español en sus hogares según el censo de los Estados Unidos.

Además, Hispanic Council, un think tank independiente que tiene como misión difundir la herencia cultural hispana de Estados Unidos, señala que el español es ya la segunda lengua más hablada en 43 de los 50 estados del país. Los estados del sur, más próximos a México y en los que las raíces españolas están más presentes, son donde más se habla nuestro idioma: Texas (29,4 %,) , Florida (21,8 %), California (29 %), Nuevo México (26,1 %) o Nevada (21,8 %). Asimismo, afirma que el 13,5 por ciento de los estadounidenses habla español en sus casas.

Otro aspecto que refuerza que el español está al alza en Estados Unidos es que es el segundo idioma más estudiado en todos los niveles educativos, siendo una lengua con mucho futuro debido a la que la comunidad hispana tiene la media de edad más joven respecto al resto.

La relevancia del español en la primera potencia mundial se confirma con su presencia en las webs oficiales de instituaciones como el Gobierno, el FBIMedicare o la Biblioteca Nacional de Medicina.

USAGov en Español es la guía oficial de información y servicios del Gobierno de los Estados Unidos.

Por todo esto, el español está adquiriendo una posición de influencia en la vida y cultura de los norteamericanos, abriéndose camino a pasos agigantados en ámbitos como el laboral, el político, el musical, etc.

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